Mercury siempre intentaba mantener una sonrisa en su rostro, y al mismo tiempo, contagiar a sus compañeros y a todas las personas que estuviesen cerca de su entusiasmo, y se veía reflejado en sus conciertos, la manera en que podía hacer llorar o saltar de alegría a cada persona que escuchara su voz y sus letras.
Mercury mantenia constantes dudas sobre sí realmente podría volver a ser el artista que tanta gente alrededor del mundo admiraba. Llego a pensar que todas aquellas personas que llegó a considerar su familia le fallarian e incluso, le abandonarían. Esta estrella del rock vivió muchas y situaciones en muy poco tiempo, llegó a consumir diversas sustancias alucinogenas, además de de descontrolarse en muchas de las fiestas que celebraba en sus mansiones . Permaneció mucho tiempo con una depedencia emocional con su esposa, amiga y confidente Mary Austin.